El Colexio de Podólogos de Galicia celebra mañana y el sábado un curso formativo en el hotel Santiago Apóstol al que asisten treinta y cinco podólogos
Luis Cantó, ponente:
“La baropodometría ayuda a averiguar la capacidad de una persona para estabilizarse y mantener el equilibrio”
El Colexio de Podólogos de Galicia celebrará mañana viernes, día 28, en el hotel Santiago Apóstol (Costa de San Marcos 1, Santiago) un curso sobre técnicas e instrumentación cinética en baropodometría, exploración biomecánica y postural aplicando plataformas de presiones, en horario de 16:30 a 20:30 horas. La formación, a las que asisten treinta y cinco podólogos colegiados, continuará mañana sábado, día 29, en horario de 9:30 a 13:30 y de 16:00 a 20:00 horas.
El podólogo, especializado en exploraciones biomecánicas del pie y de la postura y tratamientos ortopodológicos, profesor asociado de la Universidad Miguel Hernández de Elche y profesor de Educación Física, Luis Cantó Núñez, es el encargado de impartir el curso. Según explica, la baropodometría es la capacidad para medir las presiones del pie, que permite un análisis cinético de la estática o dinámica del pie, es decir permite medir y analizar cómo cada superficie o zona del pie que entra en contacto con el suelo sufre diferentes magnitudes de fuerza.
Cantó señala que la baropodometría es una prueba complementaria que ayuda y apoya a la exploración biomecánica, pero no es una prueba concluyente para un diagnóstico. Entre las aplicaciones de la baropodometría, Cantó destaca la posibilidad de detectar la diferencia de carga entre una pierna y otra en el origen de algunos casos de dismetrías, detectar a su vez zonas de hiperpresión en pacientes diabéticos, verificar las zonas de hiperpresión en una metatarsalgia, testar a través de pruebas el planteamiento de un tratamiento ortopodológico o revisar los tratamientos propuestos.
El podólogo explica que en la baropodometría se realizan mediciones en estática, dinámica y estabilométrica para analizar la variación del centro de presiones a lo largo del tiempo y, en consecuencia, averiguar la capacidad de una persona para estabilizarse y mantener el equilibrio. Además, los asistentes han conocido los diversos tipos de sistemas de análisis, como son las plataformas de presiones, los pasillos de presiones, las plantillas instrumentadas o los sensores discretos.